Entre una y las otras las coincidencias son el gusto por el mar y cierto tipo de caricias que van más allá del cuerpo. También se puede tener en cuenta las miradas y la forma de decir- que bueno que ya es suficiente de este río y de estos gritos- cuando en realidad nada les alcanza. El origen mágico de los objetos está relacionado, íntimamente, con el uso que ellas hacen de ellos por eso en las tazas blancas de sus casas el té tiene la fragancia de un paso de frontera. Liliana Campazzo, en Fuera de juego. Espacio Hudson, 2019.