Taza de té (Marilyn Contardi)

Me gustaría poder decir:
"a cup of tea" como los ingleses,
apretando "tea" entre los dientes
como una vibrante escama de aire,
pero no puedo y mi "taazaa de tée"
con sus vocales amplias se posa
en su blancura de porcelana
sobre la oscura mesa, igual
a un nenúfar en las aguas de espejo
bajo el infinito estrellado.


Cocina por la mañana

Entre
deshechos, tristes peladuras de papa,
sabañones hostigando los pies,
restos de café frío:
Elegías de Duino
¿qué arcángel escuchará mi grito?

Los días están hechos de horas
las horas de minutos
los segundos...
tic-tac
tic-tac
caen
del péndulo,
arenilla impalpable,
a canastadas

No hay una esperanza perversa
en el afán por restaurar
esos pequeños actos?

Mientras pone: "Alas de celofán"...
el ajo... al alguacil...
no ahoga
un débil gemido
en alguna parte?

Cuando las cabezas decapitadas
de los alcauciles
son arrojadas al agua
suben con el vapor
agonías sin nombre, amargos
misterios de amor

Sus pobres secretos, imágenes
de un tiempo claro:
abanico pintado, un ramito
de azahares de cera amarillenta
y el olor a lavanda
todavía

Imaginen:
el hilo dorado del té
cae
humeante
el tufito con olor
a limón levanta del fondo
de la taza un presentimiento,
cosas extraordinarias:
reverdece la corona murmurante
acaricia el rostro ajado
aventa la escoria de los días

Ave! Ave! Ave!
i-nex-pre-sa-ble
y grave

"Me gustaría que"...
"Desearía que"...

Arrêtez-vous là!
Déjenlo así!
Y desconfíen!

Por millares
han sucumbido a esto

El más terrible de los silencios
respondió a:
"Por qué me has abandonado"...

Tomando té en la galería

...la hojitas de té
del fondo de la taza
han vuelto a su forma,
parecen recién cortadas,
al morderlas sueltan
las últimas gotas de sabor,
sólo el color
se niega a volver

corpúsculos impalpables,
labrado minucioso
en la membrana de la hoja,
hinchados de perfume
vagan por el espacio
entran en mi cuerpo...
...aires del monte Fuji...

amigo...entonces...
¿errarán almas y aromas
en las corrientes del aire
como aves perdidas
...pero dónde?
cómo encontrarlos
entre la inmensidad?
-eh Villon, adónde fueron
esas neiges d antan,
te fuiste con ellas?-
por qué no serían los mismos
que acompañaran al iluminado
Wang Wei, o al errante Li Po
mientras subía
por el sendero de las mariposas,
o tal vez,
los que se filtraran
entre los blancos cabellos
de Tou Fou
cuando iba ensimismado
y la naturaleza se abría a él
en confidencias inesperadas?

"En la Naturaleza
nada se pierde
todo se transforma"

Pasa el avión de medianoche
en ruta hacia el oeste,
quisiera parecer una estrella fugaz,
pero ruge y sus rugidos
caen en trombas por la oscuridad,
trastornan las hondas cavilaciones
de los árboles.

Desde la luna más alta
bajan sombras amadas,
acompañadas por la noche
aprendieron a ser sombras,
como un agua entre los dedos
se escurren entre las plantas
y ni un alma está despierta.
Un rayo de sol

Un rayo de sol
se hunde
en la taza de té
¿lo bebo?

en «En constante inconstancia» obra poética. Paraná : Uner, 2018.

Marilyn Contardi es poeta y cineasta. Nació en Zenón Pereyra, Santa Fé y hoy reside en Colastiné, localidad de esa provincia. A finales de los setenta y principios de los ochenta vivió en Francia. Antes estudió en el Instituto de Cine de la Universidad del Litoral y actualmente es docente del taller de cine de la UNL. Realizó más veinte films documentales, entre los cuales se destacan: Zenón Pereyra, un pueblo de la colonización; su segunda parte Cielos azules; Homenaje a Juan L. Ortiz; Bienal; Qué es el cine y Momentos musicales. Publicó cuatro libros de poesía: Los espacios del tiempo (Caracas, 1979); El estrecho límite (Santa Fe, 1992); Los patios (Santa Fe, 2000) y Cerca del paraíso (Córdoba, 2011).

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